UC - Críticas
| País: USA. Año: 2015. Duración: 115 min. Género: Comedia.
Dirección: Seth MacFarlane. Guion: Seth MacFarlane, Alec Sulkin y Wellesley Wild. Música: Walter Murphy. Fotografía: Michael Barrett. Distribuidora: Universal Pictures International Spain.
Estreno en España: 31 Julio 2015. Calificación por edades: No recomendada para menores de 16 años. |
Reparto: Mark Wahlberg, Amanda Seyfried, Seth MacFarlane, Morgan Freeman, Liam Neeson, Jessica Barth, Giovanni Ribisi. |
LOS COMPITRUENOS EN BUSCA DE LA RISA PERDIDA
'Ted 2' es la secuela de la comedia gamberra protagonizada por el osito de peluche irreverente ideado por el humorista norteamericano Seth MacFarlane. Una vez superada la originalidad argumental de su precedente, esta secuela parece carecer de ideas propias que proponer, limitándose a repetir situaciones y gags dentro de una producto endeble que vuelve a demostrar las limitaciones como director de cine de MacFarlane y de como sus gracias son más divertidas sobre el papel que cuando se desarrollan en un largometraje, como ya le pasara en la a ratos más imaginativa 'Mil maneras de morder el polvo' (2014) que también padecía de esa arritmia narrativa.
SINOPSIS: Recién casados, Ted y Tami-Lynn quieren tener un bebé. Pero antes de ser padre, Ted tendrá que demostrar ante un tribunal de justicia que es una persona.
El humor absurdo de 'Ted 2' es más inofensivo de lo que promete, tan sólo un par de chascarrillos de índole sexual tientan el bordear la línea de lo admisible en la rígida sociedad moralista norteamericana, pero por lo general, la idea de querer humanizar al osito de peluche con vida propia y convertirlo en un persona normal, es errónea en su concepto, la excentricidad imposible del muñeco viviente es justo lo que hacía divertido al personaje. Tan sólo un par de secuencias inspiradas y con la mala leche requerida, como aquella en la que los compitruenos se dedican a tirar objetos a los runners, nos harán sonréir brevemente.
'Ted 2' es un film entretenido, pero insuficiente, su punto de partida histriónico y extravagante necesitaba de mayor garra y arrojo tanto en su puesta en escena como en su capacidad transgresora. Y es que últimamente hay demasiadas películas hollywoodienses que venden la moto de lo "malote" y terminan por convertirse en clones de los tópicos de las comedias románticas. Aquí también hay mucho de eso, mucho fumar yerba, soltar tacos y hablar de sexo, para luego caer en el sentimentalismo más ñoño que te puedas tirar a la cara, es lo que tiene querer ser comercial a toda costa. Junto al oso amoroso, vuelve a compartir pantalla Mark Wahlberg, que sabe mantenerse en un segundo plano de la verdadera estrella de la función, y en esta secuela se cambia de "chica guapa" y aparece Amanda Seyfried para sustituir a Mila Kunis. No dudo de que habrá una tercera (e innecesaria) parte si los datos de taquilla han sido los esperados, pero si la hubiera confío en que MacFarlane sea capaz de articular una obra más madura, no en el sentido serio de la palabra, si no precisamente en todo lo contrario.
